martes, 7 de julio de 2009

Los orígenes

A veces pienso, como me gustaría poder contar con una máquina o algo parecido con lo que poder moverme a través del tiempo. Algo con lo que soñé desde niño y que aún ronda por mi cabeza. Pero no para moverme por recónditos territorios o conocer personajes famosos del pasado. No, aunque también podría estar bien, solo me conformo con conocer quienes fueron mis antepasados, saber de donde vengo y quien soy.
La máquina no la tengo, aunque las ganas por saber de mi pasado, sí.
De siempre me apasionó esta idea, creo que es algo que debe llevarse en la sangre, algo que te inculcan de pequeño, ese algo que va creciendo en tí conforme te haces mayor y que llega el día en que preguntas y te preguntas quienes, donde, como eran...
Hace algún tiempo que empecé este camino, y a día de hoy son ya cerca de sesenta los nombres encontrados. Los últimos datos los encontré el pasado sábado en la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de Consolación de El Pedroso. Antes ya lo hice en la Iglesia parroquial Santa María del Alcor.
Aún recuerdo aquel hormigueo que me recorrió el cuerpo cuando encontré en nuestro Archivo municipal, sin esperarlo, el nombre de una persona que seguramente me tenía que tocar algo. Cuando pregunté por él, estaba en lo cierto, era uno de mis tatarabuelos maternos. Y continué y continué, remontándome en una de las líneas de sangre siete generaciones atrás.
Lo dicho, algo que me apasiona. ¿A quien no le gusta saber sobre su pasado, aunque a veces no encuentres lo que esperabas o deseabas? Sin duda, seguiré en la formación del árbol genealógico.
Y al final, descubrí que, por línea materna, tengo sangre procedente de Valsequillo (Córdoba) y Pallares (Badajoz), además de El Pedroso. Por línea paterna, sangre mairenera y..., habrá que buscar.

Pd.: si podéis, os animo, es algo muy gratificante.

4 comentarios:

Eunice dijo...

Y cada uno de esos nombres irá acompañado de una historia personal que, trasmitida a través de las distintas generaciones, se convierte en un cuento real salpicado de pinceladas de misterio y magia.

Enhorabuena por tu trabajo, y ánimo para seguir descubriendo.

Eu

balla dijo...

Gracias Eu, en eso estamos, en no aburrirnos, y cuando tenga tiempo libre a continuar. Sobre todo, porque sé que esto le hace ilusión también a muchos familiares, sobre todo a los mayores, porque añoran y recuerdan a los que no están.
Gracias también por visitar este blog.

Pd.: ¿te conozco?

Anastasio Pineda dijo...

Me ha gustado este post, balla, siempre quise hacer esto que tu cuentas, pero...
Debemos ser conscientes de nuestras limitaciones... No me veo,... una pena, en fin también puedo animar a otras ramas del árbol, que no son pocas.
Un abrazo, amigo.

PD: Sé que andas hiperocupado, pero no dejes que se oxide el blog,... tiene seguidores.

balla dijo...

Tampoco creas que es tan complicado amigo. Y tú de tonto creo que no tienes un pelo, jajaja.
Cuando te vea, si quieres, te cuento algunas cosillas y verás como es factible la cosa.
En cuánto al blog, uff, creo que a veces es cuestión de estados de ánimo y no de estar más o menos ocupado. Soy de los que piensa que siempre hay tiempo para todo si uno se lo propone.
Pero bueno, intentaré que no se oxide, y gracias por "seguirme".