La osadía podemos entenderla como atrevimiento, imprudencia, descaro o, incluso, a veces, falta de respeto.Desde luego, hay personas con un poco de todo. De todo entienden, de todo saben, de todo se atreven a opinar. Más fácil es, aún, cuando nadie hay enfrente para rebatir sus ideas y planteamientos. Y encima, seguro que afirman que en la pluralidad está la democracia, la libertad...
Todos en una misma línea, desde el primero al último, no se escapa como se suele decir ni el acomodador, todos contra un enemigo común. Esperemos que dentro de poco cambie la cosa y podamos escuchar opiniones de todos los gustos.
Planteamientos rancíos, arcaicos. Que le vamos a hacer, cada uno empuja para el lado que más le interesa. Afortunadamente, estamos en un pais libre.
Por último, algo que escuché anoche, y que no quería dejar pasar y escribirlo, me caló una frase que en mi cabeza ha rondado muchas veces. Y mirad, la dijo alguien con ideas contrapuestas a mí, el Sr. Ruiz Gallardón. Así que, más o menos, hemos de no guardar rencor a nadie porque eso nos hace sufrir aún más, y por otra parte, nunca (o eso intentaré por mi parte) una idea, un conflicto, una diferencia política, debe romper un lazo de amistad.
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