Hoy, nos hemos levantado más temprano que otros domingos habituales. Nos hemos vestido, hemos salido a desayunar, hemos charlado un ratillo después del café y nos hemos vuelto a montar en el coche.
Nuestro rumbo: la casa de unos buenos amigos.
Nuestra causa: saludarlos y conocer a un nuevo visueño, Javier, que nació el pasado jueves.
Me pongo a escribir estas líneas, y pienso como pasa el tiempo; cuantas cosas hemos dejado atrás, cuantas vivencias, cuantos buenos ratos, cuantos malos, porque ha habido de todo. Pero al final, dices, "después de casi 15 años aún continuamos todos y todas juntos, viéndonos semanalmente, conviviendo, apreciándonos, incluso conociéndonos aún, tomándonos nuestras cervecitas, con nuestra quiniela, que por cierto, nunca nos toca nada". Esta es la vida, nos estamos casando, van llegando los niños y niñas...; como se suele decir, ley de vida.
Desde este humilde blog, felicitar a Bea y Javi, por ese hermoso varón que acaban de traer al mundo. Niño, que nos hace a algunos sentirnos un poco más mayores. Porque, es que parece que fue ayer cuando estábamos en Torredelmar.
Felicididades Papás.
PD: espero que Javier salga bético, como su madre.
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